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Obras en Comunidades de Vecinos:

Una oportunidad para revalorizar nuestra propiedad.

Cualquier obra causa molestias e inconvenientes, pero siempre tenemos que ver la parte positiva de este tipo de actuaciones.  Las reformas hechas en la comunidad nos ayudarán en caso que queramos poner a la venta o alquilar nuestro inmueble. ¡Una buena primera impresión es decisiva!

 

Las reformas en una comunidad de vecinos requieren muchas reuniones, acuerdos, desacuerdos, etc.  Sin embargo, uno de los temas que preocupa más a los vecinos a la hora de enfrentarse a alguna de las reformas de la comunidad es la correcta elección de los profesionales escogidos para llevar a cabo tal transformación.

Nuestra empresa cuenta con un equipo de profesionales que minimizaran las molestias e inconvenientes, haciendo que sea una experiencia positiva para todos y cada uno de los propietarios de las viviendas.

Pintar y arreglar las zonas comunes.

Hay zonas como escaleras o pasillos, que son especialmente sensibles a los desperfectos y la suciedad en paredes etc.  Son lugares que soportan numerosas mudanzas y por donde pasan a diario muchas personas que sin querer, golpean y ensucian estas estancias  

Otra de las tareas de una comunidad de vecinos es mantener estas zonas limpias, por eso de vez en cuando se tiene que pintar la escalera y reparar todo tipo de desperfectos que pueda haber.

 

Dar una buena impresión de la escalera, además de hacernos sentir orgullosos a todos los vecinos que vivimos allí, multiplicará las opciones de vender o alquilar un inmueble en caso que un vecino quiera hacerlo.

Reparación y mantenimiento de la piscina. 

Algunas comunidades de vecinos disponen de una piscina para toda la comunidad, este tipo de infraestructura necesita de un mantenimiento anual que ya está previsto en las mensualidades de los vecinos. 

 

El problema surge cuando la piscina sufre una reparación importante. En ese caso, la mejor opción es dejarse aconsejar por buenos profesionales y poner solución al problema cuanto antes, ya que si no se hace cuando se detecta el problema, el tiempo jugara siempre en nuestra contra haciendo que cada día que pase se agrande y sea más caro repararlo.

Reparar una azotea o tejado.

Normalmente cuando en el tejado o la azotea de un ático se sufren filtraciones de agua debido al mal estado de la impermeabilización del suelo este problema pasa a la comunidad de vecinos, que será quien deberá ocuparse de toda la reforma completa.

 

En el caso de tejados o azoteas en mal estado es siempre mejor prevenir que lamentar, ya que los gastos derivados si la avería afecta a los vecinos serán muy superiores. Os aconsejamos solucionar las filtraciones en cuanto empiecen a detectarse.

Gestionar el ahorro energético. 

Todos sabemos que una parte de lo que pagamos cada mes en el recibo de la comunidad, es para sufragar el gasto de la factura de la luz.  Pero en la mayoría de las ocasiones, no pensamos que hoy en día existen muchas fórmulas para llegar a ahorrarnos dos tercios del consumo energético que tenemos de luz.

 

Cambiar sistemas antiguos, que le cuestan (solo en iluminación) mensualmente 200€, por otros de led, hará que ahorres hasta 125€.  Esto le supondrá a la comunidad 1.500€ anuales de ahorra solo en consumo.  Además hay que añadir que estos sistemas tienen una gran durabilidad, haciendo que también ahorremos en mantenimiento y bombillas.

Vale la pena hacer una pequeña inversión entre todos los vecinos para conseguir ahorrar en los próximos recibos.  En un corto plazo recuperaras la inversión y además podrás emplear ese dinero en otras mejoras.

Mantenimiento del garaje.

La comunidad de vecinos se encarga de muchas de las tareas de mantenimiento del edificio siendo el garaje una de las tareas más demandadas.

 

Sabemos que los garajes requieren de un mantenimiento periódico en el que se verifican todas las instalaciones y los elementos más comunes. Por eso queremos hacer un repaso de las principales tareas de mantenimiento.

 

Extintores. Los extintores deben pasar su revisión periódica.

Las luces del garaje.  

Se deben comprobar todas las luces, bombillas, tubos fluorescentes e interruptores.  Debemos arreglar y cambiar lo que este en mal estado.

 

Tampoco olvidaremos comprobar que todas las luces del alumbrado de emergencia funcionen correctamente y cambiar las que no por uno nuevo.

 

Hay que limpiar todo perfectamente a la vez que se revisa.

Cuidado del suelo. 

El suelo es una de las partes que más cuidados requiere a causa del desgranado de manchas que dejan los coches.  Se debe tener en cuenta que no todos los garajes son iguales, por eso es preciso realizar un estudio de las características del suelo con el objetivo de utilizar las herramientas adecuadas.  Las principales tareas son, barrido y el fregado de toda la superficie del garaje, la aspiración, el secado y el abrillantado.

 

Papeleras. Si nuestro garaje dispone de una papelera está se deberá reponer y vaciar periódicamente.

Conductos de limpieza. Los conductos de limpieza se encargan de renovar el oxígeno del garaje, por eso hay que limpiarlos y revisarlos correctamente.

 

Paredes, puertas y  exterior. Las paredes, las puertas y el exterior del garaje también requieren de un mantenimiento. Las paredes se deben limpiar y pintar al igual que el exterior.  Las puertas se deberían revisar periódicamente para poder garantizar su correcto funcionamiento.

En definitiva:

Mantener en buen estado las zonas comunes de nuestra Comunidad de Vecinos, es bueno para todos y cada uno de ellos y son imprescindibles para que nuestras propiedades mantengan e incluso aumenten su valor.

692 643 241

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